El Mitsubishi Lancer Evolution III fue el primer vehículo de Mitsubishi, el cual en la era de los Grupo A consiguió el primer título absoluto del Campeonato del Mundo de Rallyes con Tommi Mäkinen como piloto en la temporada 1996. Ese año, Mäkinen obtuvo cinco victorias en el WRC con el Lancer Evo III y obtuvo el primero de cuatro títulos de campeonato consecutivos. El Lancer Evo III debutó durante la temporada del WRC de 1995 y estuvo en uso durante una temporada y media en el WRC y luego fue reemplazado por el Lancer Evo IV en 1997 y V en 1998, ambos modelos siguiendo la estela del Evo III venciendo en el mundial de Rallyes dando a la marca de los rombos tres títulos en el mundial de rallyes.
La historia de los Mitsubishi Lancer Evolution comenzó en 1992 cuando se presentó el primer Lancer Evolution que se comercializó, al que luego siguió la versión de rally en 1993. En las etapas de rally, Mitsubishi Lancer Evolution I llegó como reemplazo de Galant VR-4, con Kenneth Eriksson y Armin Schwarz como los principales pilotos del equipo Mitsubishi Ralliart Europe.
Desde la creación del Lancer Evo I se comenzó a utilizar una transmisión AWD de Galant, en combinación con un motor turbocargado de 4 cilindros y 2.0 L (nombre de fábrica 4G63T) y una caja de cambios manual de 5 velocidades, un sistema que se implantó en el resto de modelos de la marca japonesa.
En 1993, Eriksson obtuvo solo un podio y Mitsubishi terminó quinto en los puntos de los fabricantes. El Evolution II participó en la temporada del Mundial de Rallyes de 1994 y luego llegó el Evolution III en 1995.
El Mitsubishi Lancer Evo III tenía varias mejoras en comparación con las generaciones anteriores, incluido un diseño más agresivo con un gran alerón trasero y un nuevo parachoques delantero, lo que permitía un mejor suministro de aire, intercooler y frenos. El motor era el mismo (2.0L 4G63T), pero mejorado y con más potencia que antes, con 270 CV de potencia y 450 Nm de par. El coche de rally del Grupo A tenía la misma potencia, pero claro, era mucho más ligero que una versión de calle.
En ese lapso de tiempo, el fabricante japonés estaba concentrado en el Campeonato de Rally Asia-Pacífico. por lo que el nuevo Lancer Evolution III tuvo su debut en la primera ronda del APRC, el Rally de Indonesia en julio, con Kenneth Eriksson y Staffan Parmander. Terminaron en segundo lugar en la carrera del debut. Más adelante en la temporada, Eriksson se anotó tres victorias en el APRC y trajo los títulos de fabricantes y de pilotos a Mitsubishi.
En el Campeonato Mundial de Rally, Lancer Evo III debutó en el Rally de Nueva Zelanda de 1995 en julio, con Eriksson terminando en quinto lugar y Tommi Mäkinen se retiró después de un accidente. La primera victoria llegó en la siguiente prueba, en el Rally de Australia. Kenneth Eriksson ganó en la prueba Australiana, mientras que Makinen terminó en cuarto lugar.
En agosto, Mäkinen ganó el Rally de los 1000 Lagos, pero este no formaba parte del calendario del Mundial de Rallyes, solo contaba para el Campeonato de 2 litros. La victoria australiana fue la única de Mitsubishi en la controvertida temporada del WRC de 1995, que terminó con la exclusión de Toyota de la competición debido a los turbo ilegales. Mitsubishi fue segundo en los puntos de constructores, Eriksson tercero y Makinen quinto en la clasificación de pilotos.
En la temporada 1996 del Mundial de Rallyes, el Lancer Evo III mostró todo su potencial, logrando cinco victorias en nueve pruebas de la mano de Tommi Mäkinen con Seppo Harjane como navegante. Conduciendo el Mitsubishi #7, Makinen ganó en Suecia, Kenia, Argentina, Finlandia y Australia, llevándose de manera dominante su primer título de campeonato por delante de Colin McRae de Subaru y Carlos Sainz de Ford.
El otro piloto de Mitsubishi Ralliart, en el Lancer #8, fue Richard Burns, quien participó en cuatro eventos del WRC, contribuyendo al segundo lugar en la clasificación de constructores. Burns tuvo más éxito en el Campeonato de Rally de Asia-Pacífico, donde obtuvo una victoria y dos podios, lo que le dio a Mitsubishi otro título de fabricantes APRC. Burns terminó en segundo lugar.
Con seis victorias en el Campeonato del mundo a su favor, la vida competitiva del Mitsubishi Lancer Evo III llegó a su fin después de la temporada 1996, cuando el fabricante japonés presentó el Evolution IV para la temporada 1997 de Mundo. Un vehículo nuevo que tenía un diseño completamente diferente, con un motor y una transmisión que giraban 180 grados.
Hasta 1999, Tommi Mäkinen consiguió tres títulos mundiales de rally más con tres evoluciones diferentes de Lancer, pero el Evo III siempre será recordado como el primer Mitsubishi que subió a la cima del mundo de los rallyes.
Algunas de las especificaciones más destacadas del Mitsubishi Lancer Evolution III son su chasis monocasco de acero con jaula antivuelco, carrocería berlina de acero de 4 puertas, un largo de 4.3 metros, un ancho de 1,7 metros y 1,40 metros en su altura, lo que se veía reflejado en sus 1.200 kilogramos. El Motor japonés (4G63T) de 4 cilindros 2.0, turboalimentado que daba una potencia de 270 CV (450Nm), una potencia repartida en sus cuatro ruedas con su tracción 4X4.
La unidad de este reportaje fue fabricada en Inglaterra a partir de un vehículo de calle, y recientemente llegó a Canarias, donde ha sido restaurada por el grancanario Víctor Mendoza, un fiel a la marca de los tres diamantes, participando con varias versiones de los Lancer Evo entre el 2007 hasta el 2017.
Se ha trabajado minuciosamente sobre el vehículo para que este sea una réplica exacta, en cuanto a estética del vehículo ganador del Mundial en 1996, de ahí su rotulación y la placa que se encuentra en su capó, M7 MRE, la cual fue utilizada entre el 95 y 96 por Kenneth Eriksson, Tommi Makinen, Richard Burns y Didier Auriol. Aunque además de su estética, se ha intentado mantener también sus especificaciones originales, por lo que el vehículo está preparado para participar en pruebas sobre tierra, además de tener lo necesario para participar también en asfalto.
La historia de los Mitsubishi Lancer Evolution comenzó en 1992 cuando se presentó el primer Lancer Evolution que se comercializó, al que luego siguió la versión de rally en 1993. En las etapas de rally, Mitsubishi Lancer Evolution I llegó como reemplazo de Galant VR-4, con Kenneth Eriksson y Armin Schwarz como los principales pilotos del equipo Mitsubishi Ralliart Europe.
Desde la creación del Lancer Evo I se comenzó a utilizar una transmisión AWD de Galant, en combinación con un motor turbocargado de 4 cilindros y 2.0 L (nombre de fábrica 4G63T) y una caja de cambios manual de 5 velocidades, un sistema que se implantó en el resto de modelos de la marca japonesa.
En 1993, Eriksson obtuvo solo un podio y Mitsubishi terminó quinto en los puntos de los fabricantes. El Evolution II participó en la temporada del Mundial de Rallyes de 1994 y luego llegó el Evolution III en 1995.
El Mitsubishi Lancer Evo III tenía varias mejoras en comparación con las generaciones anteriores, incluido un diseño más agresivo con un gran alerón trasero y un nuevo parachoques delantero, lo que permitía un mejor suministro de aire, intercooler y frenos. El motor era el mismo (2.0L 4G63T), pero mejorado y con más potencia que antes, con 270 CV de potencia y 450 Nm de par. El coche de rally del Grupo A tenía la misma potencia, pero claro, era mucho más ligero que una versión de calle.
En ese lapso de tiempo, el fabricante japonés estaba concentrado en el Campeonato de Rally Asia-Pacífico. por lo que el nuevo Lancer Evolution III tuvo su debut en la primera ronda del APRC, el Rally de Indonesia en julio, con Kenneth Eriksson y Staffan Parmander. Terminaron en segundo lugar en la carrera del debut. Más adelante en la temporada, Eriksson se anotó tres victorias en el APRC y trajo los títulos de fabricantes y de pilotos a Mitsubishi.
En el Campeonato Mundial de Rally, Lancer Evo III debutó en el Rally de Nueva Zelanda de 1995 en julio, con Eriksson terminando en quinto lugar y Tommi Mäkinen se retiró después de un accidente. La primera victoria llegó en la siguiente prueba, en el Rally de Australia. Kenneth Eriksson ganó en la prueba Australiana, mientras que Makinen terminó en cuarto lugar.
En agosto, Mäkinen ganó el Rally de los 1000 Lagos, pero este no formaba parte del calendario del Mundial de Rallyes, solo contaba para el Campeonato de 2 litros. La victoria australiana fue la única de Mitsubishi en la controvertida temporada del WRC de 1995, que terminó con la exclusión de Toyota de la competición debido a los turbo ilegales. Mitsubishi fue segundo en los puntos de constructores, Eriksson tercero y Makinen quinto en la clasificación de pilotos.
En la temporada 1996 del Mundial de Rallyes, el Lancer Evo III mostró todo su potencial, logrando cinco victorias en nueve pruebas de la mano de Tommi Mäkinen con Seppo Harjane como navegante. Conduciendo el Mitsubishi #7, Makinen ganó en Suecia, Kenia, Argentina, Finlandia y Australia, llevándose de manera dominante su primer título de campeonato por delante de Colin McRae de Subaru y Carlos Sainz de Ford.
El otro piloto de Mitsubishi Ralliart, en el Lancer #8, fue Richard Burns, quien participó en cuatro eventos del WRC, contribuyendo al segundo lugar en la clasificación de constructores. Burns tuvo más éxito en el Campeonato de Rally de Asia-Pacífico, donde obtuvo una victoria y dos podios, lo que le dio a Mitsubishi otro título de fabricantes APRC. Burns terminó en segundo lugar.
Con seis victorias en el Campeonato del mundo a su favor, la vida competitiva del Mitsubishi Lancer Evo III llegó a su fin después de la temporada 1996, cuando el fabricante japonés presentó el Evolution IV para la temporada 1997 de Mundo. Un vehículo nuevo que tenía un diseño completamente diferente, con un motor y una transmisión que giraban 180 grados.
Hasta 1999, Tommi Mäkinen consiguió tres títulos mundiales de rally más con tres evoluciones diferentes de Lancer, pero el Evo III siempre será recordado como el primer Mitsubishi que subió a la cima del mundo de los rallyes.
Algunas de las especificaciones más destacadas del Mitsubishi Lancer Evolution III son su chasis monocasco de acero con jaula antivuelco, carrocería berlina de acero de 4 puertas, un largo de 4.3 metros, un ancho de 1,7 metros y 1,40 metros en su altura, lo que se veía reflejado en sus 1.200 kilogramos. El Motor japonés (4G63T) de 4 cilindros 2.0, turboalimentado que daba una potencia de 270 CV (450Nm), una potencia repartida en sus cuatro ruedas con su tracción 4X4.
La unidad de este reportaje fue fabricada en Inglaterra a partir de un vehículo de calle, y recientemente llegó a Canarias, donde ha sido restaurada por el grancanario Víctor Mendoza, un fiel a la marca de los tres diamantes, participando con varias versiones de los Lancer Evo entre el 2007 hasta el 2017.
Se ha trabajado minuciosamente sobre el vehículo para que este sea una réplica exacta, en cuanto a estética del vehículo ganador del Mundial en 1996, de ahí su rotulación y la placa que se encuentra en su capó, M7 MRE, la cual fue utilizada entre el 95 y 96 por Kenneth Eriksson, Tommi Makinen, Richard Burns y Didier Auriol. Aunque además de su estética, se ha intentado mantener también sus especificaciones originales, por lo que el vehículo está preparado para participar en pruebas sobre tierra, además de tener lo necesario para participar también en asfalto.
27.05.2022 - ©BeniCazorlaPhotography